Enloquece mi ser, se libera mi mente

Parte I

Qué hago?
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Qué observo entonces..?
Qué pienso mientras me emblanquezco y achico?
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Qué es eso que me pregunta tu mirada?
Qué hace en mí que me estira gratamente y me transforma?
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Qué provoca que tu ausencia me duela y tu presencia me libre de mi mente?
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Parte II

Creo que son pequeñas locuras que me producen tus momentos..
Digo.. son simples retazos de luz que me abrazan y transforman..
Podrá este existir comprender lo que me generan tus miradas?
..Esa boca semicontenta, esos ojos que intimidan, esos rasgos que me enloquecen?
Puede tu pelo generarme el rompimiento del tiempo y la quietes infinita cuando lo observo?
Al parecer son tus movimientos los que dan a mi mente la energía como para activarse por horas, días.. eternidad.
Pienso si... quizás de más, pero al fin y al cabo es tu danzar que me pierde en mares desconocidos que no sé cómo pasar..
Pero un momento..
Pienso, pero mientras pienso sonrío encontrando en las curvas de la marea todo lo que busco en mi aventura.
..y eso es perfecto, es lo que me trae la incertidumbre diaria, el misterio de los encuentros, las conversaciones inesperadas que motivan mis pasos, que entibian mis noches, que me llenan hoy.. y también mañana.

Así que no digas, más bien, no me obligues a decir que el pasado fue mejor.
Porque como dicen los ángeles que todavía cantan, mañana es mejor..

En la vereda del sol.

No pretendo que el paso de las horas me haga sentir más suficiente de mi mismo, pero tampoco creo que las pocas neuronas que parecen entonar en tu mente me dispongan de la respuesta para el silencio que producen tus andares, no tus andares, sino las ausencias de tus andares. Porque yo no alcanzo y el resto no hace falta, no existe manera que cambie la expresión, de que alteres mi razón, más no creo ya en los pocos hilos que se van de mi pensamiento eterno, oculto y desordenado.

Espero, si, espero... como esperan los turistas la brisa de un caluroso verano. Espero pero no a ti, ni a ella, ni a la de más allá, espero más al destino que es más conciso y decidido que el resto. No hay más, ya nada que esperar.. pero espero. Espero y me muero por vivir en la espera algo que la atenue, algo que la esfume.

Ese es el momento en que mis sombras esperan, en que mi mente se altera, en que mi sonrisa se rellena, y vuela, o al menos camina por la vereda del sol.

Creo que estoy loco

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Rozan los bordes de la insanía los pensamientos que se acercaron hasta mis puertas. Aquella memoria que tanto había olvidado reflotó en mí ese espacio claustrofóbico de mi mente que se torna laberintoso y cerrado. No me imaginaba, yo, persona no grata en los campos de la emocionalidad, un nervio repleto de inseguridades, un cable pelado que amenaza con la supervivencia de los que se acercan.
De entre los complejos caminos que pude tomar, el último en mi haber era el tremor de mi locura. Aquella triste columna que solía leer y aquellas errantes notas de mi guitarra daban la evidencia perfecta para comenzar la historia de mi éxodo como ser racional. Esto no era ni más ni menos que lo que necesitaba mi mente para colapsar. Por supuesto que estoy hablando de esa variable que agrietaba mi ser, de esa razón que obnubilaba precisamente MI razón.
La raíz de estas condenas se llamaba Ailiñ, tenía pelo castaño oscuro, ojos almendrados y una sonrisa que dejaba relucir sólo en contadas ocasiones, pero que uno agradecía que esas aleatorias ocasiones se den. Ella era impulsiva, segura de sí misma... cómo reducir esta descripción? era de esas personas que se ven sólo aquellas veces en que uno observa con atención, y que cuando lo hace no quiere perder de su vista.
La cuestión es que ese momento sucedió hace no menos de 2 días atrás (entre tanto rigor y tanta sinapsis enroscada uno olvida el orden de los acontecimientos). Yo leía ensimismado el libro que hacía meses tenía en mi mochila y que por alguna u otra razón nunca comenzaba a leer, leía acerca de este joven francés que tenía una vida monótonamente normal hasta que luego de un misterioso conflicto lo declaran loco.. Esto ahora se hace muy familiar con mi realidad actual, con mi psiquis actual..

......................................Retazos de insanía.....................................

Preso de tu peor vos

Van sembrando problemas los hombres de pena para sentirse miserables. Van creciendo cabezas de ideas que parecen quimeras destrozando la paz del mar. Cruzan helados los muertos en vida que viven pensando en la muerte y mueren dejando de pensar.
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Hoy es el día en que veas la luz que se asoma en tu frente esta mañana? Hoy vas a mostrarle al pedazo de tierra que vale la pena el polvo que se muerde y la respiración venidera?
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No sientas más lástima por el pasado cuerpo sin vida que vivió tus momentos sin saber los males que pasarían. No imagines ya más que el siguiente paso es un nudo que se agolpa como la angustia en tu garganta, como la lágrima en el rabillo, como el temblor ansioso de miedos recordados.
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Hoy puede ser el día en que los falsos amigos se vuelvan historia. Hoy puede ser el día en que la risa tape la fría brisa de la incertidumbre apesadumbrada. Hoy estás vos, o mejor dicho, hoy podés empezar a estar vos y dejar al muerto en costumbres de tristezas colgado en el perchero.
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Amanecen entre retazos las porciones de cielo que te dan la esperanza de que hoy, sólo hoy y a partir de hoy, ya no sos preso de tu peor vos.

Vos no me dejaste

No esperes en el alero de esta travesía.
No espero las pocas mañanas que pudieron ser hoy.
Abrigan eternos los pocos momentos que no fueron.
Se cae la resina de viejas batallas olvidadas.
Cantamos como cantaban los pájaros que extrañan un viejo nido.
Amenazan con golpearnos los nuevos problemas de nuestras realidades.
Ambos sabemos que lo poco que hicimos lo hicimos por más,
aunque todos atinen a decirnos que era preferible nada, antes que eso.
Cuentas entre sueños historias actuadas de personajes similares a nosotros.
Veo en los micros sonrisas parecidas y miradas espejadas.
Casi que caminamos juntos en distintos puntos del mapa,
como el quiebre de una hoja cortada por el entorno,
como el vuelo de un ave que destroza el viento sin herirlo.

Vos no me dejaste nena.. vos no me dejaste, tampoco yo a vos.

La sombra de tus ojos

Esperan atentos los retazos de tu pasión. Tus ojos iluminan la perspectiva de ese objetivo.
No queman ya palabras en el lecho de la razón, sólo pasa el rato la resaca del tiempo.
Quiero que me digas si fueron las palabras o quizás sólo los momentos.
Quiero que me expliques si las caricias no eran cálidas, si los consejos no eran lo que necesitabas.
Quiero.. pero no, no importa, no hace falta, el momento en el que la cabeza anula el recuerdo es cuando uno comienza a ser sin ser parte de otro, y eso.. debo decirte que eso aconteció..
Sin embargo acá estoy, escribiendo una carta que se convertirá en ceniza... que será parte de este suelo atestado de memorias escritas y desechadas.
...
...
Quizás...
...
Quizás estoy... porque no permito que el recuerdo le falte el respeto a mi persona, a este que soy hoy, a este hombre que cree en el amor como cree en el horizonte, como cree en los demás. Que cree en los ojos que miran a otros como mira la galaxia al infinito.
...
Creo..
Creo porque prefiero morir creyendo y vivir sufriendo, que vivir pensando que no hay ojos como esos que me miran cuando escribo.

Apología de la vida

Uno se acostumbra a ver lo que hay adelante nuestro, y empieza a perderse de lo maravilloso que es..
uno se cansa quizás de ver? uno se cansa de sentir? se cansa de entender que lo que le fue dado es tan puro, y tanto, que lo menosprecia? lo ignora?
Uno se aburre con la vida que corre frente a sus ojos? bosteza entre mensajes de magnificencia de la naturaleza? del amor? de lo que podríamos llamar Dios?
Uno se cansa de lo inentendible? o no entiende que lo que lo cansa en realidad lo debería enamorar?
Uno presencia la infinitud de la galaxia, y la hermosura de lo que yace entre nosotros, frente a nosotros, sobre nosotros, y se abstiene del sentimiento de plenitud?
Qué es lo que hace que cada vez nos hallemos menos?
Qué es lo que hace que no nos alcance con el amor que tenemos alrededor?
Qué acaso no es suficiente con lo que nos dieron? con TODO lo que nos dieron?
Por qué siempre pedimos más y agradecemos menos?
Por qué siempre encontramos una razón para no sonre
ír?
Por qué no disfrutamos de cada momento y aprovechamos cada instante al máximo? Sabiendo la amplitud de posibilidades y la finitud del tiempo?
Por qué hacemos que sea tan posible la pérdida de lo que tenemos?
Por qué no amamos o nos creemos menos?
Por qué elegimos lo ventajoso en el ahora en vez de lo hermoso y duradero?
Veo la lágrima caer sobre mi mejilla y a la vez sonrío porque este dolor de dolores pasados, sólo es pasado y me doy cuenta de todo lo que tengo, de todo lo que quiero, de todo lo que pienso.
Hoy me siento yo, me siento pleno, me siento hombre y alma, me siento tierra y viento, me siento acompañado, me siento contento, me siento abierto a amar y a que me amen.
Soy yo entre todos ellos, pero somos todos en este momento.. esto.-

Hoy te prometo

Hoy te prometo que las hojas ya se han enrojecido.
te prometo que la espera fue necesaria,
que el largo de tu pelo ya no es agradable,
te prometo que la vida cómo era no era ni vida.

Hoy te prometo que no sólo los pájaros pueden cantar,
que lo que pronuncio ya no es un eco de mis objetivos,
que pronto agitaré mis brazos y volaré,
te prometo que aquello que criticabas me sigue haciendo feliz.

Hoy te prometo que siento mi guitarra cerca mío,
que mi canción anuncia una partida placentera,
te prometo que lo que cae vuelve a ser lluvia,
que no enternecen más las miradas al vacío.

Hoy te prometo que sonrío frente al pasado,
te prometo que no me atormentan los besos que perdimos,
que sigo disfrutando lo asombroso del invierno,
que me encanta el café sólo conmigo.

Hoy te prometo que la vida vuelve a ser vida,
y que después de tanto tiempo no miento en decir que vuelvo a ser.. libre.

La espalda de la luna

No necesito tus palabras para expresar,

no necesito las caricias que has de dejar,

no me interesan tus poemas sin terminar,

que vas pensando se ríen de tu andar.

No me interesa la fruta que cae del árbol,

más bien la que ofrecen las mejores ramas,

No me interesa el pan que ofrece el trigo,

así como tampoco el agua de los ríos.

No creas que el sol es eterno sólo porque hoy brille,

No creas que el viento ha de refrescarte cuando lo precises,

No pienses que el cielo te esperará para que no te mojes,

No insistas cuando la luna te de la espalda de noche.

Bosquejo de un amor

Bosquejó su amor en unos pocos trazos,
Amenazó tímidamente con destruir su arte,
pero lo amaba demasiado como para convertirlo en pasado,
quiso sentir lo que sentía aquel pájaro que cantaba en su ventana,
comprendió su canto como danzando en su sentimiento,
no paró su mano de señalar detalles en el papel,
siguió dibujando el momento ilusorio en el que se encontraba con ella,
el hermoso fruto de su mente,
el preciado rostro salvador de su alienada existencia,
volvió a escuchar el susurro cantor,
volvió a correr hacia la ventana en busca del mensaje completo de esa sinfonía,
volvió a querer perseguirlo como loco,
pero a lo que se arrimó fue a volar sobre el vacío mismo.

Su ser ya se convirtió en tinta,
sus ojos están rellenos de grafito,
sus grandes objetivos ya forman parte de dibujos ajenos,
sus mejillas rosadas ahora son grises,
pero entre tanto gris, entre tanta soledad,
se ve como se juntan figuras enamoradas de muchachos bocetados
que no se separarán más, que no se sentirán más ajenos,
ya son ambos, creación y creador, partes del mismo bosquejo...

 

Amigo en vías de extinción

Me dejas, te vas y me dejas aquí.
Te vas y no reparas en el hecho de tu ausencia en mi devenir.
Te vas y te alejas, casi sin comprender,
que ya no serás parte de mi mañana, que ya no querré saber de tu ser.

Sólo exijo un poco de consideración,
Un poco de razón que explique al corazón como me dejas.
Vas con tan poco cariño,
Ves sin tanto análisis el correr de mi mirada estrujada.

Algo me da paz en el fondo,
quizás es el instante de un ser que se regocija con el sólo hecho de ser.
Pero ya no sangro en el mismo estanque,
ya siento que la partida será un mal recuerdo como un tajo en la carne sensible.

No hay momentos que recordaremos malos,
pero tu partida hizo en mi lo que hace al mundo la extinción de un ser.

Hombre busca refugio

Saturado, hombre busca refugio en su mente.
Yace abrumado por las actividades que le trae la rutina,
descansa en la sombra del árbol de la conciencia.
Respira profundo, tan profundo como le permiten las ráfagas neuronales.
Ahí dentro no se aleja de su abatimiento
ya que flotan apacibles los monstruos que lo acechan en el aburrido ciclo continuo diario.
No merece su pesar pero quién merece lo que genera el día a día,
quién merece el intercambio constante de emociones,
quién merece el reloj acelerado que le impone el cemento,
quién es el merecedor del daño provocado por las olas de rabia social.
Hombre busca refugio en su mente cansada,
tiembla en retazos de gritos censurados,
se emociona al ver que su sombra no es sombra, sino que es parte de una ráfaga de viento.
Hombre se desvanece y se une en la danza del tiempo..

Jueves de atardecer

Voy buscando la calma, tu calma, mi calma, el alma que llama al viento, que llama las palabras de viejos encuentros, de viejas lejanías. Ahora tan cerca de mi, tan cerca del sol, te fuiste deshaciendo sin ver, sin ver que no hay que entender las acciones, mis acciones cuando bailo en esta ocasión, cuando bailo ya sin , ya sin verte. Me siento bien.

La nimiedad fue su amor

Él le enseñó que sus ojos eran su luz en la oscuridad,
él le cantó mil veces los deseos de su salvaje corazón,
él le arrebató su alma y ató su ser de la manera más tierna,
él soñó e hizo soñar a su mente metiéndola en viajes nunca solitarios.

..Pero el tiempo..

Él protestó cuando ella lo confundía con el paisaje,
él no supo discernir entre nimiedad y su afecto hacia ella,
él culpó de sus males y adversidades a su sonrisa,
él mató la alegría de ambos, matando el amor que llevaba dentro.

Ella lloró, pero sin saber qué le esperaba,
Ella soñó, pero sin saber qué soñar,
Ella vibró, hasta ya no pensar en su mirada,
Ella rió, pensando que la nimiedad fue su amor.

Sólo un trozo de dolor

Creo que la última vez que ofrecí mi corazón a un ser fui estafado completamente, hechizado por el olor particular de piel de verano y aroma a felicidad. Esa vez me sentí llevado por el corazón así como lleva el agua de una corriente a las hojas de otoño que se suicidan del árbol. Nunca pude ver el puñal que se asía lentamente frente a mi por el trance que me había producido el impostor roce de amor. Así como cortan el cielo las aves, se cortó todo vínculo, toda naif idea de prosperidad, todo quedó reducido a cenizas esa tarde en un café.
Ella airosa entró sin mirar a nadie, como si entrara a un campo de batalla, destinada a destrozar mi mente cual copa en caída. Sus ojos estaban apagados, fríos, su boca era otro trozo de hielo, asentada en una mezcla de expresiones de incomodidad y odio. Se sentó sin presentaciones y anudó sus manos en una pelea patrocinada por la ansiedad. Toda su presencia altanera cayó como un muro al sentarse en esa silla, dejándola al desnudo, débil e indefensa frente a mi.
Yo, consciente, asustado, me di cuenta de qué era lo que pasaba, y mi expresión de estúpido amor que ponía cada vez que la veía se transformó en la combinación de horror, estupor y amargura. El tiempo se detuvo lentamente, los sonidos se silenciaron, el espacio se oscureció o pareció perderse de la escena, sólo quedamos allí nosotros dos sentados en esa pequeña mesa.
Ella me miró, tragó saliva y su ansiedad pareció contracturarle el cuerpo. No pudo hablar, ni siquiera tartamudear. Abrió la boca, y volvió a cerrarla lentamente como si se tratara de timidez adolescente.
No hicieron falta las palabras en verdad, jamás lo habían hecho. Terminé mi café, tomé mi sombrero, la observé por última vez recordando todo el amor que había existido y fluído entre nosotros, y caminé hacia la puerta, sintiendo a cada paso como se resquebrajaba mi alma y estrujaba mi corazón...

Luna de amor

Amanece la luna sedienta de sol,
permanece sin bruma pero en sí abrumada
porque ya no quiere sentirse luna,
ya quiere su cara mojada lejos del cielo

La ven los pájaros que se esconde a llorar
entre las sombras de copas de ombúes viejos
ella responde a los alaridos de la tormenta
con gritos de esperanza en su inmensa distancia

La fe no pierde de que la Tierra la abrace
en sueños permite achicar ese lazo
eterno, necesario, imposible de cortar
porque es el amor a la humanidad.. el que le prohíbe arrimarse al mar.